Ahorro de energía mediante la gestión de la captación solar

La protección solar dinámica es fundamental para conseguir una fachada de alto rendimiento.

Las ventanas de una fachada son el punto más débil en términos de transferencia energética, en ambas direcciones. A pesar de que el cristal moderno ha evolucionado a un ritmo impresionante, todavía no puede ofrecernos los valores dinámicos de g, U y LT que necesitamos para satisfacer unas necesidades que cambian a lo largo del año y así poder optimizar las condiciones ambientales interiores y el rendimiento energético.

La única forma de conseguirlo consiste en aplicar en el edificio una combinación inteligente de ciertas funciones básicas: la protección solar dinámica, una adecuada elección del tipo de cristal y sistemas de iluminación, refrigeración y calefacción con sensores de presencia. La ciencia lo demostró hace años y ahora el mercado lo está demandando. En el ámbito de la protección solar, la clave del éxito reside en la forma de controlarlas.

El objetivo de nuestras estrategias de calefacción y refrigeración es reducir la tasa de consumo energético necesaria para hacer funcionar un edificio sin dejar de garantizar unas condiciones ambientales agradables para sus ocupantes. Así que básicamente podemos resumirlo en: contribuir a la refrigeración del edificio cuando sea necesario y contribuir a la calefacción del edificio cuando sea necesario (puede leer más sobre el aislamiento dinámico abajo):

  • Mantener el confort y la eficiencia energética durante la época de frío requiere una estrategia de calefacción: capturar el calor procedente de la radiación solar, almacenarlo en masas térmicas, retenerlo mediante un sistema de aislamiento y transmitirlo al edificio según sea necesario.
  • Mantener el confort y la eficiencia energética durante la época de calor requiere una estrategia de refrigeración: evitar las indeseadas ganancias solares y reducir al mínimo la necesidad de refrigeración artificial.

 

Principios del Aislamiento Dinámico®

El Aislamiento Dinámico® consiste en posicionar los dispositivos de protección solar de la fachada según las necesidades determinadas de una hora, un día o una época del año para gestionar el intercambio térmico entre el exterior y el interior del edificio.


Principios del Aislamiento Dinámico® en la época de calor (durante el día) y en la época de frío (durante la noche).

De acuerdo con las necesidades determinadas de una hora, un día o una época del año...

El Aislamiento Dinámico® genera valores g (coeficiente de ganancia solar) y valores U flexibles y provechosos mediante el posicionamiento de los dispositivos de protección solar de la fachada según las necesidades determinadas de una hora, un día o una época del año. De esta forma se consigue un mejor control del intercambio térmico entre el exterior y el interior del edificio. Este resultado solo puede alcanzarse mediante un sistema de automatización con la programación adecuada.

El coeficiente de transferencia de calor total (valor U) mide la tasa de calor que se transfiere a través de una zona de ventanas. Cuanto más bajo sea el valor U, mejor es el aislamiento. Para determinar el rendimiento del Aislamiento Dinámico®, deben combinarse los valores U del acristalamiento y los de los dispositivos de protección solar: un acristalamiento simple con un dispositivo de protección solar puede ofrecer un valor U superior al del doble acristalamiento. Por ejemplo:

     1. Acristalamiento simple: U=5,9

     2. Doble acristalamiento: U=2,7

     3. Triple acristalamiento: U=1,8

     4. Doble acristalamiento con persiana enrollable: U<1,8

Impacto sobre el ahorro energético

La protección solar dinámica tiene un impacto en diferentes factores, gracias a lo cual se reduce el consumo de energía del edificio durante todo su ciclo de vida.


Parámetros clave que combinados desempeñan un papel importante en la planificación y el diseño de optimización de una solución para un edificio:

  • g: % de energía que recibe una habitación a través del cristal únicamente (equivale al coeficiente de ganancia solar)
  • gtot: % de energía que recibe una habitación a través del cristal y de la protección solar
  • U: capacidad de aislamiento de la protección solar y del acristalamiento
  • Lt: coeficiente de transmisión de luz (LT)
Reducir el consumo energético del edificio a lo largo de su ciclo de vida:
  • Permitir un redimensionamiento adecuado del equipo del sistema de climatización (calefacción, ventilación y aire acondicionado) instalado
  • Mejorar los valores U reduciendo la pérdida de calor
  • Permitir una reducción del uso de cristal revestido
  • Reducir significativamente las ganancias de calor
  • Aprovechar al máximo el uso de la luz natural
  • Reducir la necesidad/uso de luz artificial

Coeficiente de ganancia solar

El gráfico anterior muestra una selección de diferentes tipos de cristal, entre ellos, el Single Clear (simple) y el Double Clear (doble) y después se añaden diferentes niveles de revestimiento selectivo. También se muestran los valores g y LT para cada tipo de cristal.

Usando acristalamiento sin revestimiento en combinación con una protección solar dinámica, podrá "abrir o cerrar" el flujo de energía que se transfiere a través de la ventana de acuerdo con las necesidades determinadas de un día, una semana, un mes o una estación del año. De este modo podrá controlar la ganancia de calor en verano y la pérdida de calor en invierno. Además, esta solución también le permitirá reducir el deslumbramiento. Esta es la idea que hay detrás del "valor g dinámico".

El valor de la flexibilidad...

El coeficiente de ganancia solar (valor g) mide la energía solar que se transmite a través de las ventanas. El valor gtot es la combinación del valor g de una ventana con el de su protección solar.

El gtot (o gsistema) que se necesita en la mayoría de los edificios de hoy en día no debe ser superior a 0,10-0,15, lo que es muy inferior a lo que puede ofrecer un cristal por sí solo.

Al usar un cristal simple sin revestimiento, o incluso Low-Iron, en combinación con una protección solar dinámica, dispondrá de flexibilidad para cambiar el gtot en función de las necesidades del momento y siempre manteniendo el valor LT (transmisión de luz) más alto posible.

Lo ideal es que el valor g sea bajo en verano, para reducir la ganancia de calor, y alto en invierno, para aprovechar esta fuente de calor gratuita.

Para conseguir esto se pueden combinar los dispositivos de protección solar con una buena elección del tipo de cristal y así reducir las necesidades de calefacción y refrigeración al mínimo. Pronto se dará cuenta del valor añadido que supone la flexibilidad frente al uso del cristal únicamente. Estos son los principios del Aislamiento Dinámico®.

 

Póngase en contacto con nosotros si desea saber más sobre los beneficios de la protección solar dinámica.

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